La tercera entrega de Ant-man es el inicio de la fase 5 del universo cinematográfico de Marvel, el comienzo de lo que promete ser un evento igual de importante y emocionante como lo fue la saga del infinito.
Quantumania nos muestra un inicio algo lento pero que desencadena los hechos futuros de esta saga, presentando a Kang El Conquistador, un villano que promete regresar en The Kang Dynasty, enfrentados a la nueva alineación de Avengers.
En esta entrega nos presenta a Scott Lang disfrutando la fama de ser un vengador y salvar el universo, pero ahora se enfrentará a nuevos problemas en el reino cuántico gracias a un proyecto fallido de su hija Cassie, que deja varada a toda la familia en esta parte poco explorada de este mundo. Al llegar a este reino se nos cuenta el pasado de Janet Van Dyne y porque su miedo a que se explore el reino cuántico.
La formula de Marvel ya es conocida por todos, accion y chistes, pero en el caso de Ant-man es la misma formula que se ha venido trabajando en las entregas anteriores, no como la saga de Thor que empezo de una forma increible y en las ultimas entregas nos presenta a un protagonista tonto y con muchos chistes.
Al final de esta historia no se pueden despegar hasta ver las 2 escenas post créditos la primera abriendo camino para el futuro de la saga y la segunda podría confundir a más de uno que sigue solamente las películas del universo Marvel.