El nombre de Luis Estrada sin duda es uno de los más reconocidos dentro del cine mexicano y este nos presenta su nuevo largometraje después de ocho años de ausencia, nos muestra una nueva sátira política muy adecuada a los nuevos tiempo con grandes sorpresas.
La película nos narra la historia de Pancho Reyes, un trabajador de clase media que aspira a tener una mejor vida, haciendo todo lo posible para llegar su propósito, este viene de un pueblo muy humilde en donde el abandonó a su numerosa familia y ahora tendrá que regresar para finalizar asuntos pendientes.
Motivado por la avaricia y acompañado de su mujer, sus hijos y su sirvienta, Pancho viaja al remoto y ruinoso pueblo de La Prosperidad, para al fin rencontrarse con su muy resentida familia, en donde veremos una guerra a muerte.
Al parecer esta ausencia ha afectado mucho la calidad de producción de estrada ya que el aceptara que esta producción tuviera una duración de más tres horas es porque confiaba mucho en proyector o descuido al largometraje, ya que esto es un problema por todos lados en donde lo veamos.
Empezando por el guion aunque la premisa es muy fácil después del primer acto llaga a ser repetitiva y los chistes que pudieran atinar después de la tercera vez que lo repiten solo logran incomodar a la audiencia.
En Segunda es la dirección de los personajes ya que aunque los actores principales como Joaquín Cosío, Damián Alcázar, y Alfonso Herrera no ocupan mucha trabajo el resto del electo pareciera que solo fueran a cobrar un cheque ya que no nos cautivan en sus actuaciones haciendo sus diálogos demasiados plano haciendo mucho más tediosa la película.
Y por último la edición hay muchísimas escenas que se pudieron recortar u omitir haciendo más fácil y digerible para el público ya que en momentos parecía que estábamos en un loop de circunstancias que no llegaban a ningún lado, no se si esto se debe a que originalmente esta producción estaba pensada para una plataforma y fue llevada mejor a al cine y tenga que cumplir cierto tiempo pero este es el punto en donde se pudo ver más la desesperación de la gente que la vimos.
