Por Roberto Cota Briceño
Durante muchos años el sitio web Rotten Tomatoes se volvió un referente en los medios en cuanto al “valorar” una serie de tv o una película, asignando calificaciones por parte de “críticos” y después una calificación por parte del público.
Las dudas que comenzaron a generarse hace algún tiempo cuando las calificaciones de “los críticos” y las del “público en general” eran bastante dispares, pero ahora parece que la bomba a estallado pues Vulture ha dado a conocer que Rotten Tomatoes está involucrado en pagos a críticos por dar opiniones positivas para tal o cual proyecto.
Se supone que todo empezó en 2018, cuando una película llamada Ophelia, protagonizada por Daisy Ridley, siendo una nueva versión de Hamlet, tuvo muchas críticas negativas, con trece reviews, tenía una aprobación de apenas 46%, fue entonces que la agencia publicitaria de la cinta, Bunker 15, empezó a buscar “apoyos” de la crítica, pagando 50 dólares por crítica positiva. Esto hizo que Ophelia subiera hasta el 62 % de aprobación y dejó de estar “podrida” y todo arreglado.
En un mail, Bunker 15 explicaba lo que los críticos deberían hacer si la película no les había gustado pero aún así querían expresar su opinión, habiendo críticos que aceptaban no publicar la crítica en sus webs, sino en un “blog más pequeño que Rotten Tomatoes no ve.” Y así se aseguraban que todos salieran ganando.
Rotten Tomatoes ha tomado cartas en el asunto, dejando a Ophelia fuera de su catálogo de películas reseñadas, así como otras películas representadas por Bunker 15 que ya no aparecen en Rotten Tomatoes ya que se sospecha que la agencia de publicidad hizo lo mismo con dichas películas y pudo haber manipulado la puntuación.
